El último filtro antes de mandar el producto, es el DOCK AUDIT, una inspección final y crucial en el proceso de calidad, pues es el último mecanismo de control que se tiene en la empresa para verificar que el material cumpla con los estándares.

¿Qué riesgos corres al enviar productos sin un Dock Audit?

Enviar productos defectuosos puede causarte muchos problemas en la confiabilidad de tu empresa, haciendo que tu cliente no pueda venderlos o que quiera devolverlos, incluso perder al cliente, provocar un accidente al usuario, generar mayores gastos, etc. Por lo que es importante que realices un dock audit como medida de prevención y parte del proceso de calidad de tu negocio.

¿Qué es un dock audit?

El dock audit es una inspección que se realiza al final, antes de mandar los productos, y consiste en que el inspector elegirá una cantidad de piezas de las cajas al aza y se centrará en el producto como en el empaque, utilizando su lista de verificación que tiene puntos de control estéticos, de función, características de seguridad, etiquetado, etc. Un problema que se puede presentar es que el inspector no elija una muestra representativa de productos al azar, porque se pueden ocultar los defectos y errores.

¿Dónde se realiza un dock audit y quién lo realiza?

La inspección se realiza en las instalaciones del fabricante, pues es donde los productos acaban de embalarse, en ocasiones suele hacerse en una bodega de almacenamiento, sin embargo, se recomienda hacerlo en la planta donde se hacen los productos para ver los tipos de defectos, sus procesos, etc, para corregir los errores y mejorar el trabajo. Se recomienda que un tercero realice la inspección, pues no es aconsejable confiar en el proveedor puesto que puede tener sus propios intereses en mente al informar o no sobre los problemas, lo mismo pasa con el personal interno, para evitar conflictos puede evadir los errores del producto o procesos.

En A&T contamos con inspectores de calidad calificados a tu disposición.

¿Cuáles son los beneficios del dock audit?

Dentro de los beneficios que tiene la inspección final es que se puede contar la cantidad de piezas, verificar el empaque y etiquetado, verificar las muestras de productos terminados, incluso resolver y retrabajar los productos defectuosos, asegurando el envío de los productos calificados.  Un Dock Audit está bien para los proveedores confiables que han fabricado los mismos productos durante cierto tiempo, pero para los nuevos proveedores que tienen piezas desconocidas o proveedores que son poco confiables, tener una inspección final es un riesgo, pues es un complemento a las inspecciones anteriores del producto hechas en la producción, sobre todo si son grandes lotes o cantidades de dinero. ¿Requieres hacer esta inspección? ¡Nosotros te ayudamos!  

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